Qué ver y hacer en Cambridge: ruta con mapa y vídeo

Hola Molaviajer@s. Acabamos de llegar de un viaje por Londres en el que hemos visitado, además de la capital, algunas de las ciudades cercanas más importantes. Cambridge no podía faltar en esta lista y menos mal, porque hemos vuelto enamorados de ella. Y para que visitar la ciudad sea más sencillo para ti, hemos seleccionado los puntos más importantes que ver en Cambridge y los hemos ordenado en una ruta para que te sea más sencillo. ¿Vienes a visitarlo con nosotros?

Cómo llegar a Cambridge desde Londres

Llegar a Cambridge desde Londres es muy sencillo y hay varias posibilidades para ello: coche de alquiler, bus o tren son las más utilizadas. 

En cualquiera de estos casos, lo más cómodo es utilizar una aplicación como Google Maps, Mapas o Citty Maper. Estas te indican, paso a paso, cómo llegar hasta Cambridge desde Londres, independientemente de cuál sea tu punto de partida dentro de la ciudad. Además, si quieres utilizar el transporte público te muestran qué compañías y a qué precio te llevan hasta Cambridge desde Londres.

TREN: Para que os hagáis una idea, si optáis por el tren, llegar a Cambridge os llevará entre 50 minutos (pagando normalmente más de 30€) y 1h y media (pagando algo menos de 20€). Como imaginaréis, a mayor rapidez, y hora punta, más caro es el billete. Algunas de las compañías de tren que llegan a Cambridge y cuyas webs podéis consultar son ThamesLink, Greateranglia o Great Northern. Yo suelo consultar en TrainLine.

¿Queréis un consejo? Después de recorrerme los alrededores de Londres utilizando muchos trenes he llegado a la conclusión de que en Inglaterra, si compráis los billetes con antelación y online conseguiréis mejores precios que en taquilla. Y cambiar la hora de un billete ya comprado es un deporte de riesgo, mejor no lo intentéis si no queréis pagar por el cambio lo mismo que cuesta un billete nuevo…

BUS: En lo que se refiere al autobús para llegar a Cambridge, hay que decir que algunas rutas se desvían hasta el aeropuerto de Stansted antes de llegar a Cambridge desde Londres, por lo que el trayecto puede llegar a durar algo más de 3 horas. Esto sucede con los autobuses de National Express por ejemplo, que tienen un coste de algo más de 20€ normalmente. En cambio, los de Flixbus son algo más baratos (los hay por 4€) y el trayecto dura entre 1 hora y media y dos horas.

EXCURSIÓN: Ahora bien, otra de las opciones más utilizadas para visitar Cambridge desde Londres, es realizar una excursión organizada en la que te incluye el transporte y la ruta de todos los puntos que ver en Cambridge. Una de las más solicitadas es esta que combina Oxford y Cambridge en el mismo día.

Mapa detallado de la ruta por Cambridge 

Para que vuestra visita a Cambridge sea de 10, os hemos dejado indicados en el mapa a continuación, cuáles son para nosotros los puntos imprescindibles que ver en Cambridge. Es lo más cómodo para no perderse nada de nada.  

Ruta por los puntos más interesantes que ver en Cambridge

Para visitar esta pequeña ciudad inglesa, plagada de colleges, universidades, museos y mucha cultura, dividimos la visita en dos partes. Por un lado creamos nuestra propia ruta con los puntos que ver en Cambridge y por otro, hicimos un Free Tour con Pepy, de Cambridge Free Tours  y con Bea, una Molaviajera que trabaja en el King’s College en la actualidad. Ambas nos enseñaron todavía más entresijos que vale la pena ver en Cambridge y algunas curiosidades de la ciudad. Bueno, pues con toda la información os hemos creado la que es para nosotros la ruta ideal que ver en Cambridge. Os la proponemos a continuación.

El museo Fitzwilliams, los Chelsea Buns y el reloj Corpus

Advertencia: si os gusta el arte podréis pasar horas en el Museo Fitzwilliams de Cambridge. Pertenece a la universidad de la ciudad, es de entrada gratuita y su colección está formada por más de medio millón de muestras de arte procedentes de diferentes siglos y civilizaciones: pinturas, manuscritos, esculturas y un largo etcétera de entre los que destacan obras de Tiziano, Monet o Rembrandt.

Los lunes está cerrado. Si vais entonces sólo podréis disfrutar del espectacular edificio de estilo neoclásico que contiene la colección. Si por el contrario tenéis la suerte de visitar Cambridge en otro momento, también podréis alucinar con la espectacularidad de su interior siempre y cuando visitéis el Fitzwilliams durante su horario de visita.

Tras el museo, os proponemos hacer una parada técnica en el Fitzbillies. Allí podréis tomar uno de sus famosos Chelsea Buns o un sándwich, unas pastas, unos huevos…

Paro que se me hace la boca agua, porque todo tenía buenísima pinta. Además, ¿queréis una curiosidad? A la vuelta de la esquina, en Botolph Ln encontráis la Iglesia de St Botolph, el patrón de los viajeros. 

Pero si hay algo que ver en Cambridge, es el rastro que la cultura ha dejado en la ciudad a lo largo de los tiempos, y nuestro siguiente punto es uno de los más importantes. Si vais por Mill Ln hacia el río Cam, os toparéis con la Scudamore’s Mill Lane Punting Station, uno de los pequeños embarcaderos del río Cam, desde el que ya se intuye el siguiente punto que os invitamos a ver en Cambridge: el puente matemático. 

Es el lugar ideal en el que aprender geometría. Y es que, a pesar de que todas las vigas de madera que lo forman son rectas, el puente transmite armonía a base de tangentes que, si os fijáis bien, veréis enseguida. Eso sí, no creáis los mitos que circulan por ahí sobre el puente matemático de Cambridge. Ni se sostiene sin tornillos, ni fue construido por Newton, que el pobre hacía maravillas con el cálculo diferencial pero no hacía milagros. Si queréis presumir delante de vuestro cuñado, decidle que él falleció en 1727 y el puente fue diseñado en 1748 por William Etheridge y construido en 1749 por James Essex the Younger.

Y de una invención sesuda nos vamos a otra, que para eso estamos en Cambridge y el cociente intelectual de la ciudad lo merece. Os proponemos dirigiros al norte por Trumpington St. Cuando menos lo esperéis, un curioso artefacto con un “saltamontes tamaño película de miedo” os sorprenderá. Tranquilos, ni el primero explota ni el segundo muerde. Se trata de el curioso reloj Corpus, que da la hora acompañado de una metáfora: y es que el paso del tiempo se devora sin remedio. 

El reloj fue inaugurado en 2008 por Stephen Hawking y su creador, el Dr. John C Taylor y es, sin duda, uno de los puntos que ver en Cambridge más característico de la ciudad.

Descubriendo el ADN y subiendo a la torre de Great St Mary’s

Aunque quizá sea un poco pronto para una pinta, pero si queréis tomar algo rodeados de sabiduría, el pub Eagle será el indicado. Allí, cuenta la historia que el 28 de febrero de 1953, Francis Crick junto con James Watson, anunciaron que habían descubierto la estructura de doble hélice del ADN.

Caminado por Bene’t St y después por Guildhall llegaréis hasta el Ayuntamiento de Cambridge, frente al cual se sitúa el Cambridge Square Market. Un mercado muy colorido con diversos productos abierto todos los días de 10:00 a 16:00 excepto Navidad, Año Nuevo y el Boxing Day (26 de diciembre).

Unos pasos más y llegaréis a Great St Mary’s the University Church. Sus cimientos se establecieron en 1010 y ha sido la iglesia de la Universidad de Cambridge desde 1209. Otro de los atractivos de esta iglesia es su torre, hasta cuya cima se puede subir por una escalera de caracol compuesta de 123 escalones. Si las piernas no os fallan, la visita está genial porque permite sacar unas fotos como las que veis en el post. Podéis comprar las entradas para subir a la torre en la tienda de regalos de la iglesia. Esto cuesta 5 £.

El King’s College, y otros colleges que ver en Cambridge

Si por algo se caracteriza Cambridge es por sus colleges. Hay unos cuantos y la mayoría de ellos son espectaculares. Yo tuve la suerte de visitar, e incluso comer en el interior del King’s College gracias a Bea, una Molaviajera mucho más que encantadora que trabaja en su interior y que consiguió que esta visita se fuera a nuestro top 3 de puntos que ver en Cambridge.

Si no tenéis la suerte de tener un contacto así, tranquilidad, porque al menos podréis visitar la capilla del King’s college, pagando una entrada de 10£ si la adquirís online aquí por adelantado o 11£ si la compráis allí en la tienda enfrete del college. 

Tened en cuenta que la capilla del King’s College se caracteriza al menos por dos motivos. El primero es su interior, ya que tiene una impresionante bóveda en abanico, que es la más grande del mundo. Lo segundo, es su coro, famoso fuera de sus fronteras puesto que cada año la BBC retransmite el “Festival of Nine Lessons and Carols” en Nochebuena. La buena noticia es que, si programáis con adelanto vuestra visita y la hacéis coincidir con una misa, quizá podáis ver ambas cosas a la vez.

Si nos lo permitís, vamos con el punto friky del día. ¿Quién no conoce el libro English Grammar in Use para aprender inglés? Bueno, pues justo aquí al lado encontraréis Cambridge University Press, la editorial del mitiquísimo método de idiomas y a su vez la librería en activo más antigua de toda Inglaterra y es que fue en 1581 cuando empezaron a vender libros en esta ubicación.

Continuando al norte por Trinity St, dejando a vuestra derecha la coqueta Trinity Ln, llegaréis hasta el Trinity College. Hoy en día no se puede visitar por la pandemia, pero esperamos que pronto se pueda, ya que en su interior recoge maravillas como la biblioteca Wren. Suerte que, al menos en su exterior, se puede disfrutar de puntos como el manzano de Newton. Que aunque nos haga ilusión pensarlo, no es el árbol del que le cayó la manzana a Newton y por el que descubrió la gravedad, sino que es fruto de un injerto del mismo, situado en casa de su madre en Woolsthrope, Lincolnshire.

Otro de los colleges que ver en Cambridge cuando abra de nuevo por la pandemia es el St John’s, que esconde dos de los puntos más bonitos de Cambridge: la capilla del St John’s y el puente de los suspiros. Este último no puede ser cruzado por los turistas, así que tendréis que verlo haciendo punting por el río Cam o esperar a que el St John’s college vuelva a abrir de nuevo para los turistas y fotografiarlo desde otro de los puentes del college. 

El puente de los suspiros fue construido hace casi 200 años, es el único puente cubierto que cruza el río Cam y el único puente universitario construido en estilo gótico victoriano.

Desde luego no es lo mismo, ni tiene tanta historia detrás, pero si no podéis entrar al St John’s, quizá os apetezca ver una de las pequeñas puertas que hay escondidas en Cambridge. Se trata de pequeños puntos que vas encontrando en tu paseo por Cambridge, que hicieron antes de la pandemia unos artistas cuyo Instagram es @dinky_doors. Esta representa el bien y el mal, pero todas las que vimos nos parecieron de lo más chulo.

Y por fin llegamos a nuestro último punto que ver en Cambridge: The Round Church, que fue construida en el siglo XII siguiendo el modelo de la Iglesia del Santo Sepulcro en Jerusalén, lo que la convierte en un edificio 75 años anterior a la universidad. Si queréis conocer más sobre la historia de Cambridge, en su interior encontraréis una exposición sobre este tema. 

Haciendo punting en Cambridge

Os hablábamos antes de uno de los embarcaderos del río Cam, y es que algo típico que ver en Cambridge (y sobre todo que hacer) es subirse a una barquita típica de Cambridge y navegar por el Cam para ver los traseros de los colleges, llamados The Backs. Bien, pues a esto lo llaman punting.

Si os apetece hacerlo, os damos dos consejos para hacer punting en Cambridge: el primero es que solo compréis billetes en lugares oficiales, como por ejemplo los embarcaderos. Desconfiad de quienes os ofrezcan billetes para hacer punting en mitad de Cambridge sin venir a cuento. 

El segundo consejo es que si os hace mal día pero os sigue apeteciendo navegar por el Cam, podéis negociar un poquito el precio. Para que os hagáis una idea, los recorridos y los precios dependen de la compañía pero vienen a durar algo más de media hora y cuestan unas 23£.

Si queréis reservar con antelación, también es posible. Aquí podéis ver un ejemplo de recorrido y precio de punting en el río Cam.

Más puntos que ver en Cambridge si pasáis varios días en la ciudad

Quizá estos puntos que ver en Cambridge no sean los principales ni los más importantes, pero son un gran plan si vais a estar en Cambridge varios días.

Uno de ellos es el jardín botánico de la Universidad de Cambridge, que alberga más de 8.000 especies de plantas de todo el mundo. Se encuentra cerca de la estación de trenes y su entrada cuesta 6,8£ o 7,5£ si queréis incluir una donación del 10%. Los horarios de apertura actualizados miradlos en la web oficial.

¿Os apetece un poco de relax? Podréis encontrarlo en el Paker’s Piece Park, que, además de ser donde paran muchos de los autobuses que llegan a Cambridge, en su momento acogió importantes acontecimientos alrededor de la coronación de la reina Victoria.

Grand Arcade muy poca gente se irá a Cambridge a visitar un centro comercial… Pero estos son nuestros aliados cuando se busca un baño público, un lugar donde comer algo en una cadena internacional o se os ha roto algo que necesitáis reponer con urgencia. Pues Cambridge tiene, por ejemplo, el centro comercial Grand Arcade para ello. 

De museos en Cambridge

A quien le gusten las exhibiciones y los museos, en Cambridge está de enhorabuena ya que hay muchos que ver y para todos los gustos. Al margen del Museo Fitzwilliams, que lo hemos incluido en la ruta por Cambridge más arriba, os dejamos a continuación unos pequeños apuntes del resto de museos que podéis ver en Cambridge para que podáis elegir si visitarlos o no. Tenéis todos geolocalizados en una capa del mapa de la ruta que os hemos dejado al principio del post. ¡Ah! Y si veis que no ponemos nada del precio del ticket es porque tienen entrada gratuita, eso sí, consultad antes sus webs oficiales para cercioraros de los horarios de apertura actualizados. Podéis encontrar todas aquí.

Museo de la historia de la ciencia Whipple: En su interior podréis disfrutar de una colección de instrumentos científicos, aparatos, modelos, grabados, fotografías, libros y muchos otros materiales, todos ellos relacionados con la historia de la ciencia y que datan de todas las épocas desde la medieval hasta la actualidad. Abre de lunes a viernes

Museo de Zoología: más de 100.000 personas visitan cada año esta exposición de miles de especímenes que abarcan todo el reino animal, desde elefantes, perezosos terrestres gigantes y jirafas, hasta aves, reptiles, insectos y moluscos. Abre de martes a domingo.

Museo de arqueología y antropología: ¿Interesados en conocer la historia de la humanidad? En este museo veréis su evolución desde cientos de miles de años atrás y cómo ha sido el paso de las diferentes culturas del mundo a lo largo de los siglos y hasta el presente.

Museo Sedgwick de las ciencias de la Tierra: Fundado allá por 1728, este museo se trata del más antiguo de los museos de la Universidad de Cambridge. Se compone de unos dos millones de piezas entre fósiles, minerales y otros objetos relacionados con la evolución del ser vivo en nuestro planeta.

Museo de arqueología clásica de Cambridge: ¿qué tal retroceder en el tiempo entre el 1.700 a.C. y el 400 d.C. a lo largo de esculturas y otros objetos relacionados con el mundo greco-romano? En este museo encontraréis una gran exposición que gira en torno a este tema.

Scott Polar Research Institute: Con origen en 1920, hoy en día es un centro de referencia sobre la exploración del Ártico y de la Antártida. Tanto es así que contiene la principal Biblioteca Polar del mundo en la actualidad. Hay que tener en cuenta que no abre todos los días de la semana.

Kettle’s Yard: Los amantes del arte contemporáneo también tienen un museo que ver en Cambridge. Se trata del Kettle’s Yard, y está situado en el que fue hogar de un curador de arte de la Tate Gallery de Londres. Y es que este, donó tanto la casa como la colección de arte que hizo a lo largo de su vida a la Universidad de Cambridge.

Museo de Cambridge: en el caso de que os interese la historia de la ciudad de Cambridge, este es el museo que tenéis que visitar. En él se exponen más de 300 años de historia y patrimonio de la ciudad y alrededores.

Dónde dormir en Cambridge

Si planeáis hacer noche en Cambridge, tenéis que saber que la ciudad es tan acogedora y de un tamaño tan manejable que cualquier sitio es bueno. Pero hemos de reconocer que preferiríamos alojarnos dentro de un college que en un hotel al uso. Porque, aquí viene lo bueno, cualquier persona puede sentirse estudiante de Cambridge y dormir en uno de sus colleges si tienen disponibilidad, como en este que os dejamos a continuación

Si no hay hueco o buscáis el típico hotel, a continuación podéis buscar hoteles en Cambridge a través de Booking:

Lugares donde comer en Cambridge

Además del bollito del Fitzbillies, o de la pinta en el Eagle, os dejamos marcados en el mapa algunos lugares más que podéis ver en Cambridge para comer o tomar algo. 

Por un lado está el Hong Kong Fusion. Sirven comida asiática y nos hablaron genial de él. 

Si lo que buscáis es algo más romántico y con unos platos un poco más elaborados, podéis ir al Cotê, que también es un poco más subido de precio. 

Más enfocados a tomar una copa, sobre todo en verano está genial el rooftop del Varsity Hotel por las vistas (la comida no es buena), y también podéis visitar Las Iguanas, con buenos cócteles. 

¿Recomendamos visitar Cambridge?

Bueno… Si no ha quedado claro a lo largo del post es que lo hemos hecho muy mal. Porque hay mucho que ver en Cambridge y muy bonito. Nos encantó la visita y sin duda le dedicaríamos, al menos, un día. Ya, si podéis escaparos dos días, mejor. 

Lo ideal es verlo con el buen tiempo pero cuando todavía hay movimiento de estudiantes. Entonces es cuando Cambridge despliega todos sus encantos y te deja con ganas de más. 

Bueno Molaviajer@s, esperamos que este post con todos los puntos que ver en Cambridge os haya gustado. Nosotros estamos deseando volver. Mientras tanto, recordad que si planeáis una visita a Londres o a cualquier otro lugar, y os surgen dudas viajeras, si nos escribís a través del formulario de contacto os echaremos una mano a la mayor brevedad posible.